Hace relativamente poco, leía
a un conocido en un foro, hablar de “Valerian”, como uno de los cómics clásicos
de su infancia, y su afán por recuperar el material que había perdido.
Yo no tengo nada de “Valerian”,
ciertamente, pero recordé que había una película basada en el cómic, “Valerian
y la ciudad de los mil planetas” (2017) que salió hace unos años, y que no
había visto.
Esta tarde, con un saco de
pipas mediante, me la he tragado, y he de reconocer, que, a pesar de que le
sobra media hora larga, no es mala película de entretenimiento.
Valerian y su compañera,
Laureline, son dos agentes de la Federación espacial. Estamos en el S.XXVIII y
los humanos viven el Alfa, una macroestación espacial, que comenzó a ser construida
como un satélite en el S.XXI, y que ahora alberga a nueve millones de humanos y
otros tantos millones de especies, y que está en continua expansión. Por ello,
es conocida como la ciudad de los mil planetas.
Pero, hay algo que amenaza la
paz en el mismo corazón de Alfa, algo desconocido, y Valerian y Laureline son
los encargados de descubrir que no todo es lo que parece.
Como digo, no está mal. He
pasado una tarde entretenida con la trama. Efectos especiales, criaturas
diversas, las cejas de Cara Delevingne, bichos que cagan perlas, un
protagonista soso y Rihanna haciendo de las suyas… Una cinta que se te olvida
en un par de horas. Pero no se le puede pedir más, ciertamente.
Tendré que leer los cómics, que,
al parecer, ya tienen unos añitos (de finales de los sesenta), a ver que tal
están.
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