El duodécimo tomo de la colección “Las Grandes Batallas Navales” trae como título “Noryang” (Norma, 2022), y como es habitual desde el primer número, viene de la mano de Jean-Yves Delitte (adaptación y guion) y Q-Ha (dibujo y color) que se estrena con este número en la serie.
El
formato y narrativa del tomo viene siendo el habitual de los números
anteriores. Una pareja de personajes nos pone en antecedentes de la situación,
de los acontecimientos previos a la batalla y la batalla se suele desarrollar
en dos o tres páginas como mucho, finalizando con un interesante contenido
extra de tipo histórico que viene a rematar la narrativa del cómic, y una
bibliografía sobre el tema.
En
esta ocasión, nos desplazamos hasta la península coreana a finales del S.XVI
(en la contraportada hay un error, y pone 1958 en vez de 1598), donde los
japoneses se han instalado para hacerle frente a los chinos, con los que
mantienen un litigio basado más en cuestiones de honor que en otras cosas.
Los
coreanos, aliados circunstanciales de los chinos, se enfrentan a los japoneses,
y plantean una batalla imitando a la de Salamina, que conocen gracias a los
jesuitas portugueses.
Los
japoneses, que de la noche a la mañana se encuentran con un conato de guerra
civil en casa por motivos sucesorios, están más pendientes de su isla que de
otros asuntos y aunque en tierra son casi invencibles, en el mar no tanto.
El
cómic es entretenido, muy bien dibujado y repetitivo en su planteamiento, como
digo, respecto a anteriores volúmenes. A mí me ha servido para conocer una
batalla que, desde luego, no conocía ni de oídas y el dibujo de Q-Ha no está
nada mal. Recomendable, pues.
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