Antonio
Gil (guionista y dibujante) no es un desconocido para mí. He leído y he
disfrutado algunos cómics suyos muy buenos, que me han enganchado pronto y
bien, como: “1941:
Vóljov”, “Stalingrado.
La historia gráfica” o “1921:
El Rif”, que son una verdadera gozada.
Por
ello, encontrarme con su nombre en la portada del trigesimoséptimo tomo
publicado por la Editorial Cascaborra, dentro de su colección “Historia de
España en viñetas”, bajo el título “Flandes: 1566-1573. Rebelión y Orden”, ya
me ha garantizado, de entrada, que el cómic que iba a leer me iba a gustar.
Antonio
Gil, bien documentado, algo habitual en sus trabajos, nos traslada a Flandes,
durante la segunda mitad del S. XVI. Bajo dominación española, y con Margarita de Parma a la cabeza, los
dominios ven como el Calvinismo se expande, y con el movimiento, la petición de
muchos nobles que quieren la libertad religiosa para aquellos lares.
En
España se debate si después de esa libertad religiosa no llegarían más
peticiones que pondrían en peligro la presencia española en la actual Bélgica,
por lo que, después de varios debates, Felipe II opta por la mano dura para
acabar con rebeldes y herejes: El envío de un poderoso ejército, a través del
Camino Español, al mando de Fernando Álvarez de Toledo, el tercer Duque de
Alba.
El
cómic nos ofrece diversos puntos de vista. Desde los de Margarita de Parma, que
angustiada pide ayuda militar (algo de los que se arrepentirá), hasta los de
los propios soldados, veteranos, o el Rey Felipe II, añadiendo información a
las escenas, y planteando las diversas vías que hubo para resolver el
conflicto, además de sus consecuencias.
El
dibujo, muy característico de Antonio Gil, es un tanto oscuro en el color, pero
correcto, con una portada impresionante. En las páginas finales, tenemos a modo
de reflexión del autor, un contenido extra, que incluye el desarrollo de los
personajes, algunos de ellos, que veremos en el cómic.
Resumiendo:
Un gran cómic, que te ayudará, de una manera muy didáctica, a acercarte a esta
parte de nuestra Historia no muy conocida por todos. Con una gran
documentación, que demuestra que Antonio Gil no ha dado pasos en falso a la
hora de recrearlo, y con una mirada muy clara, amena, y lejos de Leyendas
Negras. La Historia tal cual fue. ¿Recomendable? No lo dudes.
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