Philip Roth es uno de los mayores
novelistas que tienen en Estados Unidos. El hombre ronda los noventa años, y yo, lo conozco, pero…
No me he leído nada de él.
“Indignación” (2009) es una de
sus novelas más aclamadas y leídas, y era raro que no sacarán la película tarde
o temprano. Hoy he tenido la ocasión de ver la adaptación cinematográfica de
dicha novel. “Indignación” (2016) nos cuenta la historia de Marcus.
Estamos en 1951. Estados Unidos
está metido en el avispero de la Guerra de Corea. Marcus es un joven judío,
proveniente de la clase media obrera, se considera ateo y que vive en Nueva
Jersey. Es un estudiante brillante, y decide irse a una pequeña Universidad de
Ohio a estudiar la carrera (Derecho).
En dicha Universidad comenzará a
conocer el mundo de las fraternidades, sentirá el antisemitismo de sus compañeros, y especialmente de un viejo
y contradictorio profesor puritano, y encontrará el amor (y el sexo) en una
compañera con tendencias suicidas…
Es una película sencilla, con
grandes planteamientos sobre la religión (es impresionante la escena de reflexión
entre Marcus y el Decano de la Universidad), la sociedad y la libertad sexual
(sobre todo de las mujeres). Y sinceramente, la recomendaría por el mensaje que
intenta transmitir desde el primer minuto. Ahora me toca leer el libro…
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