“10 días de un buen hombre”
(Netflix, 2023) es una película turca de dos horas, (que dos horaaas), en la
que seguimos la historia de Sadik, un antiguo abogado que pasó por la cárcel
por un marrón que no le correspondía, y que al final, tras salir, se reinventó
como detective privado, al estilo más gringo y clásico posible, incluyendo la fumada
de doscientos cigarrillos diarios y jazz de fondo que solo escucha él, aparte de
chicas guapas orbitales…
En su investigación, que trata
sobre la desaparición de un chaval, se va encontrando mamporreros, hostias,
asesinos, secuestradores, gente muy rara, y más hostias… Lo que le va cambiando
el carácter a lo largo de esos diez días que van pasando en el metraje de
manera larga… Muy larga.
Finalmente, nos encontramos
que Sadik cambia radicalmente. La desaparición del chaval es un asunto más
turbio de lo que parece y él cree que va siendo hora de pensar en sí mismo…
Lo mejor: El jazz, las chicas (como diría Ozores), y algún plano de Estambul.
Lo peor: Las dos horas, la
flojedad de la narrativa, y que Netflix amenaza con segunda parte pronto, muy
pronto, demasiado pronto…
La dejo a vuestra entera
elección.
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