“The Witcher: El Origen de la
Sangre” (Netflix, 2022) es una precuela de la exitosa serie que hasta hace poco
ha protagonizado Henry Cavill, y digo hasta hace poco porque la próxima
temporada de caracterizará por tener a otro Geralt de Rivia diferente al que
estamos acostumbrados.
Con cuatro episodios, de
alrededor de 50 minutos, la historia nos lleva 1200 años antes de los
acontecimientos de Geralt, a un tiempo donde elfos, y enanos, se pasean por su
mundo y son amos y señores (fundamentalmente los elfos).
Una guerra eterna desgasta a
las monarquías élficas y a sus clanes, que se ven eliminadas de un plumazo por
la joven emperatriz, antes princesa, que logra reunir en sus manos los tres
reinos. Pronto, se da cuenta que el mago real, que creía un amigo o al menos un
aliado, la va a traicionar más pronto que tarde… Mientras, un grupo de
supervivientes de los antiguos clanes rivales, renegados y enfrentados al nuevo
Imperio, buscan la manera de acabar con la autoproclamada Emperatriz, a la par
que se encuentran que los nuevos obeliscos creados por el mago real son
portales a otros mundos, que pueden llegar a crear un universo diferente, una
realidad distinta a la que conocían los elfos (con la llegada de nuevos seres de
otras dimensiones, monstruos y humanos, y la creación de los primeros hechiceros)
…
Estéticamente, la serie tiene
reminiscencias de películas y muchas otras series: “Star Wars”, “Willow”, “El
Señor de los Anillos”, “Juego de Tronos” e incluso de los escenarios de papel-cartón
de la mítica “Hércules. Sus viajes legendarios” de Kevin Sorbo (solo si tienes
más de 35 años la recordarás), y “Xena. La Princesa Guerrera”, compartiendo en
este último caso los efectos especiales, que son bastante infames y patéticos.
Incluso hay un guiño bastante malo a la película “300”.
Los exteriores, rodados en
Islandia, desprenden cierto tufillo a series como “Vikingos”, y a todo lo
relacionado con ellos, aunque no salvan a la serie de lo que promete y llega a
aburrir por momentos… Hay escenas de sexo y las escenas de lucha no tienen una
coreografía del otro mundo.
Resumiendo: Si eres fan de la
serie y los cómics, como yo, la verás, estoy convencido, pero es muy posible
que hay partes que te aburran soberanamente y que se te quede cara de póker al
final del cuarto episodio. La dejo a vuestra elección, ya me diréis que os ha
parecido.
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