Alguna vez lo he comentado en entradas
anteriores, son manías que tengo… No puedo ver una segunda parte si no he visto
la primera parte, y eso me pasó con “La Bala Perdida” en su momento, y estos
últimos días de 2022 me ha vuelto a ocurrir con “Puñales
por la espalda”.
Netflix me ofrecía, desde hace
una semana, la posibilidad de ver “Puñales por la espalda: Glass Onion”
(Netflix, 2022), y yo realmente no sabía en un principio que era una “segunda
parte”, hasta que me puse a buscar información sobre de qué iba la película,
porque la que me ofrecía Netflix me pareció un poco escasa en su momento…
“Puñales por la espalda: Glass
Onion” no es realmente una segunda parte, o una secuela de su predecesora del 2019,
ya que el único papel que se repite es el de su protagonista, Benoit Blanc
(Daniel Craig), y puedes ver las dos películas de manera independiente, aunque
yo recomiendo ver primero la de 2019 para que al menos te hagas una idea de
quién es el personaje principal, de su manera de actuar y pensar y de por dónde
van los tiros…
Con dos horas y diez minutos
de duración, de los cuales sobran perfectamente unos treinta minutos, tenemos
en la narrativa al más famoso detective del mundo invitado por error a la isla
griega de un millonario que ha convocado a sus amigos para proponerles el juego
de descubrir su “propio asesinato”. Frustrados sus planes de juego para el fin
de semana tempranamente por Benoit, la narrativa se centrará en las mierdas de cada
uno de los protagonistas, y en la muerte de uno de ellos concretamente, que
llevará a la vez a la investigación de un asesinato anterior, algo de lo que
nos enteraremos a través de un largo, larguísimo flashback, que pondrá encima
de la mesa todas las cartas…
En definitiva: Entretenida,
pero no tan buena como la primera parte de 2019. Para pasar la tarde, pero sin
tirar muchos “cobetes”. Para más información, no te pierdas el vídeo que
he preparado en el canal de YouTube…
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