Hace ya un tiempo, tuve la
oportunidad de leer y disfrutar, de “Vida
y muerte de Federico García Lorca” (2018) de Iab Gibson y Quique Palomo.
Este tándem, entre hispanista y escritor e ilustrador, me encantó. Me gustó
muchísimo, por la temática, y por la manera de abordar en sencillas viñetas la
vida del poeta granadino. Y tanto es así, que he vuelto a leer ese cómic más de
una vez en los últimos meses.
Con esa carta de presentación,
cuando en noviembre (2019) publicaron, los dos mismos autores, “Ligero de
equipaje. Vida de Antonio Machado” (Penguin Random House, 2019), los dos mismos
autores (Gibson y Quique Palomo), pues no dudé en que este cómic tenía que caer
más pronto que tarde.
Y es que la vida del genial
poeta, y filósofo andaluz, Antonio Machado era demasiado fascinante para que
nadie se hubiera atrevido, hasta ahora, en dedicarle un cómic. Y qué cómic. La
versión del ensayo que el propio Gibson escribió, ya hace unos años, sobre
Machado, en 104 páginas, y con un interior sencillo, al estilo del cómic de
Lorca, con el uso del ocre, de fondo, combinado con el negro y el blanco.
En su narrativa, nos
encontramos a un joven Machado, con fuertes convicciones republicanas desde
joven, por influencia familiar. Su abuelo y su padre influyen en su vida, junto
a la pertenencia como alumno de la ILE (Institución Libre de Enseñanza), que no
seguía un currículo fijo, y donde premiaba más lo práctico, que la teoría
aburrida de las aulas.
Después vemos a Machado
opositar y viajar de aquí para allá: Soria (como profesor de francés), Baeza,
Segovia… Sin conseguir dar clases en Madrid, que era su anhelo, y lo
encontramos pronto viudo, ya que su joven mujer (Leonor) muere por la
tuberculosis.
Entre cada uno de los
episodios de su vida, nos encontramos con poemas de sus distintas etapas,
mientras vuelve a enamorarse de un amor imposible (la poetisa, Pilar de
Valderrama), la Guiomar de sus poemas.
La llegada de la República, es
para el poeta, el inicio de una etapa ilusionante, que poco a poco se va
diluyendo, y por la que él lucha a través de sus versos y sus escritos como
Mairena, el filósofo. Pero la llegada de la Guerra Civil solo le traerá dolor y
exilio, en pésimas condiciones, hasta Colliure, donde fallece y donde está
enterrado. Y allí sigue, como símbolo del exilio. Su anciana madre lo
acompañará, falleciendo tres días después.
El cómic, siguiendo la estela
del anterior, es muy didáctico, muy ameno, se lee rápido y bien, y se disfruta
muchísimo. Es un cómic que yo recomendaría, perfectamente a los alumnos de
Bachillerato que estudian la Generación del 27, para descubrir no solo al
Machado poeta, sino también al Machado hombre, al Machado filósofo.
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