“Ladronas”
es una de esas películas que ha entrado con fuerza en la plataforma Netflix
España, en esta primera semana de noviembre de este 2023 que se acaba. La cinta
francesa, le da una nueva vuelta de tuerca a la historia de “Los Ángeles de
Charlie”, para bien en mi opinión, al mostrarnos a un trío de mujeres, no tan
artificiales como las de la mítica serie, y si mucho más humanas con todo un
ramillete de virtudes, pero también miedos, defectos, esperanzas y algún que
otro palo, ya sea físico o sentimental.
En la
narrativa, Carole y Alex son dos expertas ladronas, cada una con una
especialidad y con una dilatada trayectoria como ladronas, cuyas vidas comienzan
a complicarse por el alto nivel de dificultad de los casos que les encarga La
Madrina, la pérfida jefa que las tiene amenazada de muerte y que no les deja
abandonar por nada, y que hace que cada misión sea más peligrosa que la
anterior.
Además,
Carole descubre que a sus cuarenta años está embarazada y quiere cambiar de
vida y dedicarse a otra cosa, quiere tener el bebé, ser madre y retirarse a
tiempo del mundo criminal, aún que puede. Mientras que Alex, experta
francotiradora, y muy enamoradiza, pasa continuas crisis sentimentales que
influyen mucho, y negativamente, en el desarrollo de los robos.
Ante
la presión de La Madrina, ambas optan por fichar a un tercer miembro para el
último golpe que van a dar, que es el robo de una versión de Arte Pop de “La
Gran Odalisca” de Ingres. Sam, que es una experta piloto y que se une a ellas
tras ser expulsada de una escudería de coches de competición.
Gran
parte de la hora y cincuenta y cinco minutos de la película, por lo menos una
hora larga, se basa en la relación de amistad que tienen Alex y Carole entre sí,
en mostrar sus puntos débiles y fuertes, sus gustos, deseos y anhelos, además
del entrenamiento de Sam una vez reclutada. Por eso, hay por lo menos media
hora larga que la hacen una película lenta, cuando llevaba un buen ritmo
aderezado con bastantes puntos de humor, mete un bajón considerable y bostezas,
y ahí yo habría metido tijeras y la hubiera dejado en una espectacular película
de una hora y veinte minutos que hubiera convencido más al espectador, y que no
hubiera perdido ese ritmo tan bueno que presenta al principio, y después a
ratos.
Basada
en un cómic titulado “La Gran Odalisca”, la acción es poca, pero atractiva, y
quizás la relación afectiva entre las protagonistas salva la película, unida a
una malvada jefa a la cual solo le falta tener un sonriente gato amarrado a uno
de sus brazos y la actuación de unos secundarios un tanto surrealistas, pero
que llegan a convencer a la larga gracias a las dosis de humor que le echan al
caldo.
El
final puede llegar a ser muy típico y tópico de las películas del género, pero
creo que está muy bien para cerrar, y bien cerrado una película que no debería
tener segundas partes, o eso espero. Podría haber dado para una serie, pero
vamos a dejarla como está.
De
nota, le pongo entre un 5,5 y un 6. Son buenas ladronas, pero el flamenco no es
lo suyo.
Echadle
un vistazo y ya me diréis qué os pareció.
No hay comentarios:
Publicar un comentario