“¡Nop!” (Estados Unidos, 2022)
me ha parecido una curiosa película de terror, en la que una manta-raya de otra
galaxia, acosa y devora a los habitantes de un pueblecito estadounidense.
¿Una manta-raya?, si, por
definirlo de alguna manera, porque el bicho en cuestión, que es capaz de volar
y de influir en la electricidad y aparatos de voltaje, tiene en principio pinta
de platillo volante con un agujero debajo, con el que absorbe todo ser viviente
que se le cruza, pero en los últimos quince minutos de película demuestra que
es capaz de transformarse en cosas más artísticas, pero igual de hdp…
En la narrativa: Tenemos a un
padre y un hijo que llevan un rancho de caballos. Están especializados en
anuncios, películas y cosas por el estilo, trabajos para Hollywood. Un buen
día, el padre es atravesado por una moneda de 5 centavos que cae del cielo a
velocidad supersónica, junto a otros objetos.
El chaval hereda el rancho y
le cuentan el rollo de que su padre ha muerto porque algunos objetos, caídos de
una avioneta, han sido los culpables.
Pronto se da cuenta de que
detrás de una nube que nunca se mueve, se esconde este ser, que vomita o caga
los objetos no orgánicos, y a veces, cuando se da una comilona de gente, hasta
regala alguna tormenta de sangre.
Con ayuda de su hermana y de
los frikis de turno, buscará la forma de lograr fotografías del extraño ser,
que les permita ir al programa de Oprah y hacerse ricos… Que es lo importante.
Interesante y entretenida,
tiene veinte minutos que transcurren de noche y no se ve un carajo. Con media
hora menos hubiera funcionado mejor, en mi opinión, y te hubiera contado lo
mismo.
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