Hoy hemos ido a ver “Playmobil:
la película” (2019) antes de que la quieten. No iba con una idea preconcebida,
había visto el tráiler, y había reconocido algunos de los playmobil que tenemos
por casa.
Después, al ponerme a ver
la película, no esperaba que fuera un medio musical (apenas 3 o 4 canciones),
y, que la historia, fuera tan entretenida. Partiendo de la tragedia personal de
dos hermanos, que toca la fibra a cualquiera en los ocho o diez primeros
minutos de película (igual que el epílogo), siendo actores reales, a la
aventura en el mundo de los Playmobil, donde se ven movidos mágicamente (esta
parte se deja sin explicar) y convertidos, uno en vikingo y otra en… Ella misma,
y a aprender un par de cosas sobre la familia, la vida (vivirla a tope) y los
amigos.
La película tiene algunos
puntos buenos, ahorra bastante en actores y hay escenas que recuerdan a otras
cintas (por ejemplo, hay una Jabba The Hut femenina). Creo que no tiene mayores
pretensiones, y, quizás, lo mejor de todo, sea el Agente Secreto, que es el más
gracioso con diferencia.
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