Hoy me ha tocado tragarme “The
Human Race” (2013), película estadounidense bastante regular, que parece
realizada por un grupo de colegas en un fin de semana, o en un Puente, en el
que estaban aburridos. Con una música absurda. Y con una idea que recuerda
mucho a la mítica cinta japonesa “Battle Royale” (2000).
Aquí tenemos a un grupo de
ochenta personas de distintas etnias, grupos sociales y pensamientos, jóvenes y
viejos, discapacitados incluidos, que aparecen por arte de magia en un lugar
desconocido, donde deben seguir unas instrucciones dadas por una inquietante
voz, que, en resumidas cuentas, les viene a decir que corran para vivir, aunque
por cualquier cosa te pueden matar, en un circuito cerrado donde no te pueden
sacar más de dos vueltas.
En un principio, se basan en
la historia de una joven que se cura de un cáncer, de una leucemia
concretamente, a la que sucumbieron también su madre y su hermana. Curada
milagrosamente, aparece en este juego tipo “Saw” en todas sus vertientes a la hora de hacer estallar al personal, y
nada más aparecer, muere al tocar la hierba, con un estallido de cabeza.
Posteriormente, se va
centrando en algunas de las personas que han llegado a este juego macabro, en
sus vidas y en sus historias, para verlos morir en el sitio donde se ubica la
prueba mortal a las que les han invitado a participar.
La película parece de las de
sobremesa de Antena 3, si no fuera por la cantidad de sangre, hectolitros y
hectolitros, que salen. Aparecen musulmanes rezando con zapatos, reflexiones
filosóficas, traiciones, pantallas divididas para ver a los participantes,
peleas e intentos de violación… El tiempo de metraje no está mal, no llegando a
la hora y media, pero regular es un rato, y, como os digo, es una lástima,
porque la idea no es del todo estúpida.
P.D. El final me ha parecido
original, revelador, pero me ha recordado a otras películas que no nombro, para no destripar más... (Hoy no me apetece reventaros la cinta, jajajaja)
No hay comentarios:
Publicar un comentario