Tengo que reconocer que, el
comienzo de “La villana” (2017) me ha recordado mucho al videojuego “Doom” y a
su película homologa, al estar rodada en primera persona. Los siete primeros
minutos son bastante espectaculares. La protagonista se carga, a tiros y a cuchilladas,
a cerca de ochenta tipos (no los he contado, pero yo creo que por ahí
rondarán), con sus consiguientes tres mil litros de sangre derramadas por todo
el piso.
La estética videojuego está
muy presente, al igual que el cómic (algunas fotos me recuerdan a “Sin City”).
Después la estética y el tratamiento narrativo cambian un poco. Hay una escena
que, incluso, me recuerda a los cómics de “La Viuda Negra” (bailarinas
mediante). Después de esto, bajamos en picado.
Pero, a lo que vamos… Tenemos
por una parte a Sook-Hee, entrenada como una asesina sin piedad, una auténtica
máquina de hacer escabechinas sin parar. Por otro lado, tenemos a Madame Kwon,
jefaza del Servicio de Información y Espionaje surcoreano, que la capta y la
re-entrena como célula durmiente. Diez años de su vida sirviendo a su país, y
la libertad es suya. Ese es el trato.
Vemos su pasado, su
entrenamiento, su niñez, las misiones encomendadas (con una media de noventa
muertos en cada una de ellas, y diez mil litros de sangre esparcidas por
doquier), etc etc. Después, en su “vida normal”, es espiada por su propia gente,
y aquí la narrativa se vuelve confusa, a ratos aburrida y hasta un tanto
incoherente y previsible.
Hasta los diez minutos
finales, no volvemos a tener un buen chute de acción, como al comienzo de la
cinta. En fin… En mi opinión, le sobra perfectamente media hora larga. Si la
ves, dime que te pareció.
No hay comentarios:
Publicar un comentario