“Astrid, Audaz & Los
Reyes de Thule. El Rapto” (Serendipia, 2020) de Manuel Veiga (guion) y Sal
Donaire (dibujo), y color de José Luis Río y Tiago Barsa, nace de un proyecto
de crowfunding de Verkami. Es el primer tomo de una trilogía que irá viendo la
luz, con un segundo tomo en el próximo noviembre (2021), titulado “La Regencia”,
y concluirá con “El Cátaro” en noviembre de 2022.
Lo primero que llama la
atención al avezado lector, es la mezcla de fantasía, personajes ficticios, con
hechos y personajes reales, mezclando reinos fantásticos con otros reales, en
una especie de distopia. Pronto, al lector que tenga mis años, y peine canas, le
vendrán de sopetón todas las historias de “El Capitán Trueno” de Mora, con el
que comparte la habilidad, más Audaz que Astriz (de momento), de estar en los
momentos de la Historia más concisos y justos. Desde las guerras territoriales
que enfrentaban a Francia e Inglaterra, hasta Las Cruzadas, pasando por el
imaginario Reino de Thule, hasta el norte de África y Oriente Medio,
recorriendo el Mediterráneo en barco…
Todo llevado con un buen
dibujo, que no se autocensura en las viñetas, lo cual se agradece, y con
grandes dosis de acción y entretenimiento (en sus 72 páginas), que ayudan a
olvidar u obviar algunos anacronismos históricos (pelillos a la mar, en favor
del entretenimiento, no estamos ante un cómic histórico, eso debes tenerlo en
cuenta desde la primera página) y con una atractiva ambientación. Audaz no es
el censurado y feliz Capitán Trueno, Astrid tampoco es Sigrid. Ambos personajes
han sufrido a lo largo de sus vidas, y no están para sonrisas y cabriolas. Uno
vive atormentado por la pérdida de su hermana, la otra fue secuestrada siendo
una niña, vendida, esclavizada y violada, y espera su venganza y su propia redención, siendo un personaje
con mucho más juego que la cateta Sigrid de Trueno.
El compañero colosal no
puede faltar, en el papel de un musulmán convertido al cristianismo (si, sé que
es difícil de creer) bautizado como Guzmán, así como el de un primer “Boss” con
cierto toques mágicos, como es Alnasr “El Buitre”.
Las páginas finales del
cómic tiene una galería de personajes, con tres dibujos de cada uno de ellos,
con una pequeña biografía, y lo más importante de todo: Un comentario con los
entresijos del cómic, que te ayudarán a entender ciertas cosas sobre su
creación personajes, desarrollo, contexto histórico y licencias de los autores.
En definitiva: Un cómic clásico de aventuras, de los que se disfrutan desde el principio hasta el final, y con el que te quedas con ganas de más. Estoy convencido de que gustará a lectores de todas las edades, y solo nos queda esperar a que llegue el segundo tomo.
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