Mis Redes Sociales

Mis Redes Sociales.
Sígueme en YouTube Sígueme en Facebook Sígueme en Instagram Sígueme en TikTok  Sígueme en Twitter

miércoles, 27 de agosto de 2025

F1: La película (2025)

 

         No os voy a mentir… No soy aficionado a la Formula 1, y cuando vi hace unos meses que se había estrenado “F1: La Película”, no fui corriendo a comprar las entradas. Bostecé, y me dije… Ya la veré.

        Y el día ha llegado, hoy, y me he dado cuenta que hice bien no yendo al cine, porque a pesar de que esta película seguramente se viera espectacular en pantalla grandes, desde el minuto uno, y yo no soy muy inteligente, la he visto venir a la milla, trama, desarrollo… Y, oye, no he fallado, es tal cual me la había imaginado. Muy visual, muy espectacular, eso no se lo voy a negar, pero con un metraje excesivo de dos horas y media, una narrativa predecible como ella sola, y aunque entretenida, también lenta a ratos.


        Después de haberla visto, espero impaciente, “Open de Golf: La pinícula” o “Petanca: La Venganza” … No… Bromas aparte… Repito que me ha parecido una película entretenida, y que si te gusta la Formula 1, la vas a disfrutar como un enano, seguramente ya la hayas visto y te haya encantado, y en caso contrario, que no entiendas ni “J” sobre este mundillo, verás la típica película del equipo que siempre va el último y ganan al final gracias a Brad Pitt.

¿Qué te vas a encontrar en la narrativa de “Fórmula 1”? Pues nuestra historia se centra alrededor de Sonny Hayes, una joven promesa de la Fórmula 1 en los años 90, que, tras sufrir un accidente grave en el Gran Premio de España del año 93, abandona la Fórmula Uno, y se dedica a ser piloto deportivo de distintas disciplinas, algo que, al parecer, no hace por dinero. Aquí se me atragantaron las almendras que estaba comiendo.


Tras ganar su última carrera en la Nascar (creo que era la Nascar), un antiguo compañero de equipo, ahora propietario de la escudería APXGP, Rubén Cervantes (interpretado por Javier Bardem), lo convence de volver a la “Fórmula 1” para rescatar al equipo que está en bancarrota, perdiendo hasta a las canicas, y de paso guiar a un novato talentoso, Joshua Pearce (Damson Idris), pero algo narcisista y subidito. Esto es algo que ambos pilotos comparten, de una manera u otra.

Desde el primer momento, la relación entre ambos pilotos es mala. Hayes aporta la experiencia y conoce los defectos de los coches como si los hubiese parido, y Joshua teme por su puesto en la escudería.


Así, ambos tienen sus piques mientras que la escudería no para de perder Grandes Premios, le surgen problemas constantemente, tienen accidentes, pero llega el momento en que ambos, con ayuda del equipo técnico, encuentran una conexión, comienzan a remar juntos, a conseguir puntos, y por supuesto, ganan y salvan a la escudería en el último Gran Premio. ¿Es una trama original? Para nada, pero las carreras son espectaculares, como un circo romano a lo Ben-Hur, pero en 2025…

Y como os decía, con un metraje excesivo, donde hay subtramas que sobran: La relación entre Hayes y la directora técnica de la escudería, y los eternos clichés y piques entre novato y viejo veterano de rictus impasible.


Con un presupuesto de 300 millones de dólares, y una recaudación que ha superado los 600, “Fórmula 1” se ha convertido hasta la fecha en la película más taquillera de Brad Pitt, y de Apple Studios, y como curiosidades, os comentaré que se hicieron rodajes en tiempo real durante Grandes Premios, lo cual fue una gran idea para aprovechar imágenes reales e integrarlas dentro de la producción.

La filmación se realizó en más de 14 Grandes Premios reales entre 2023 y 2024, con la colaboración de la FIA, equipos y pilotos activos como extras. De hecho, puedes ver una veintena de ellos y personalidades relacionadas con el mundillo.

De igual manera, tanto Brad Pitt como Damson Idris entrenaron durante cuatro meses con coches de F2, se grabaron con cámaras en dichos coches para evitar el uso y abuso de tomas realizadas con IA o con ordenador. E igualmente, tuvieron como asesor al piloto Lewis Hamilton, que también es productor, y supervisó escenas y partes del guion. Por cierto, la música, que se me había pasado hasta ahora, viene de la mano de Hans Zimmer y tiene una buena BSO.


En definitiva: Ignoro si la Fórmula 1 es así de apasionante realmente. En los temas técnicos me he perdido algo, pero reconozco que me ha entretenido, aunque la olvidaré en muy poco tiempo. Quizás podrían comentarse más puntos sobre “Fórmula 1”, pero no se me viene nada más a la cabeza… De nota, le voy a dar un 6.

No hay comentarios: