“Amor de Gata”
(Netflix, 2020) es uno de los mejores animes que he visto durante este año.
Tiene elementos muy clásicos que recuerdan a las películas del mítico Studio
Ghibli, y encima, con los gatos como protagonistas de la trama, que no es que
nos cuente nada nuevo y original, pero que tiene una peculiar manera de
hacerlo, y eso ha logrado engancharme la hora y cuarenta minutos que dura.
Miyo, alias “Muge”, es
una joven que va a la Secundaria. Lo ha pasado mal en la vida, ya que sus
padres se separaron estando ella en la Primaria, y tuvo que comenzar una nueva
vida, por lo que sufrió acoso e incomprensión por parte de sus compañeros de
estudio. Anda muy enamorada, y no lo oculta, de un chico de su clase, el reflexivo
e introvertido Hinode, que tiene la suerte de vivir en una familia con la que
no ha pasado los quebraderos de cabeza de Miyo, pero si otras historias que le
hacen ser como es.
Hinode pasa de Miyo y
de los espectáculos que monta para demostrarle su amor. Por ello, Miyo recurre
a un “yokai” en forma de gato grande y orondo, que tiene la capacidad de
transformar a los humanos en gatos, y a los gatos en humanos, a través de una
serie de máscaras que vende.
La compra de dicha
máscara, permite a Miyo acercarse a Hinode, ya que se transforma en una gata
blanca llamada Taro, a la que Hinode rinde prácticamente pleitesía. El lado
malo, es que el vendedor quiere, que, a cambio de dicha máscara, le dé su cara
de humana, para que pueda vendérsela a un gato. Y Miyo deberá elegir… Cómo
comento, no es una historia muy original en su trama, pero bastante
entretenida. Se deja ver.
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