Aunque tenía vagas referencias, no conocía “El Mundo de Sarvan” (Editorial DQ, 2022) de Jordi Benet (dibujo) y Antonio Segura (guion). Publicado por fascículos en la revista “Cimoc” a lo largo de 1982, en riguroso blanco y negro, y con una narrativa de Ciencia-Ficción muy interesante donde se pueden ver múltiples referencias.
Mil
años después de que su nave se estrellara en un remoto planeta, los Wolds,
organizados en castas, han olvidado que antaño vinieron de las estrellas como
seres avanzados. Entre ellos está Sarvan, una joven guerrera que se enamora de
un astronauta caído del cielo, un dios para ellos, Heloin. La joven se
encuentra con el problema de que Heloin no parece muy interesada en ella, y
está a otras cosas, y juntos intentarán superar todos los conflictos que le
plantean tanto el propio planeta y sus habitantes, como enemigos llegados desde
el espacio…
Con
referencias al “Eternauta”, la propia Biblia y al Universo de Conan y Red Sonja
(solo por nombrar algunas), “El Mundo de Sarvan” es una trepidante aventura
clásica (dirigido a un lector adulto), de espada, brujería y magia, que se
disfruta desde el principio hasta el final, ahora, como hace cuarenta años.
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