Publicada
originalmente en 1998 en tres tomos, “Uzumaki. Espiral” (Planeta Cómic, 2017)
de Junji Ito, es una tremendísima ida de pinza por parte del autor mangaka, que
tiene como protagonista al maldito pueblo de Kurouzu… Y digo maldito, porque es
un pueblo donde puedes entrar, pero no salir, rodeado por el mar por un lado,
siempre con niebla, y por el otro por unas montañas.
Un
buen día, comienzan a aparecer espirales en el pueblo, y sus seis mil
habitantes comienzan a vivir extraños acontecimientos que están relacionados
con espirales, desde tifones y tornados, hasta la conversión de gente en
espirales o en… caracoles.
Con
más de seiscientas páginas, una historia añadida y un epílogo, “Uzumaki” se
presenta como un cómic inquietante, donde las espirales abarcan todos los
grados de locura posibles, con un surrealismo elevado al cubo y un terror muy Junji
Ito, muy “de la casa”, donde la narrativa, a ratos, no tiene ni pies ni cabeza,
y eso es lo bueno…
Contiene
algunas páginas en color (pocas), y es un cómic que se disfruta desde la
primera hasta la última página, enganchando al lector, como en una espiral,
leyendo hasta poder llegar al final.
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