jueves, 2 de abril de 2009

La Estatua de la Libertad


La votación fue unánime. El Ayuntamiento había decidido colocar una replica de la Estatua de la Libertad en Badayork, como gesto de hermanamiento entre los dos países que siempre han vivido de espalda, España y Portugal, y como guiño a los yanquis del otro lado del charco. Se colocaría en nuestra particular Bahía de Hudson que es el Pico del Guadiana, junto a la Alcazaba Almohade donde se funden en uno solo el Guadiana y el ancestral Rivillas, mediría 40 metros de altitud y miraría, orgullosa, hacia Portugal, despidiendo así al Guadiana en su fluir hacia el Alentejo Portugués…



El proyecto estaría a cargo, como no, del gran arquitecto, maestro albañil y decorador de interiores urbanos, el genial Duncan de Gross, reconocido artista con más de media docena de premios regionales, ninguno nacional y poseedor de numerosas críticas (todas negativas) en su dilatada e interesante pero conflictiva carrera.



Asesorado por una cuadrilla de gatos vagabundos, el gran maestro había concebido, parido en un callejón, tal proyecto de universal envergadura en una noche mística de celo y maullidos gatunos. Su propuesta había sido aplaudida por los políticos locales, sin reservas, de todos los partidos, que veían en ella la consecución de un hito histórico-artístico de especial relevancia. No compartían esa elocuente concepción artística sus detractores, indignados aún por la última genialidad del artista, que había consistido en montar una piscina pública con trampolín en mitad de la Orchestra del Teatro Romano de Mérida mientras él mismo autor, conceptual como ninguno, la inauguraba disfrazado de gallina Caponata junto a sus múltiples y ebrios acólitos. No habían entendido el significado socio-cultural de dicho proyecto. Allá ellos.



Pero nadie le negaría que su Estatua de la Libertad, aquella que en su día recibiera a andrajosos pero ilusionados emigrantes europeos, cobraría más sentido en un Guadiana contaminado pero habitado por ranas, percasoles y submarinos portugueses que hacen practicas en el río… Ya veía las portadas de las revistas especializadas, con grandes letras, y su perfil, su característica perilla rodeada de titulares como: “Genialidad”, “Impresionante herencia artística de Duncan de Gross”, “Lo ha vuelto a hacer”…



Justo entonces fue cuando me desperté, en mitad de un callejón oscuro del Casco Antiguo, casi de madrugada, con un pestazo a absenta del copón y rodeado de una serie de gatos vagabundos que me observaban curiosos, entretenidos ante semejante espectáculo. Después de meditar si me los llevaba a todos a casa, decidí que era mejor dejarlos en su hábitat natural. Me levanté, torpemente, y me fui a casa silbando aquella canción de Sinatra: “Ooohh, Badayoooork, ciudad singular, donde los kinkis te quitan hasta el relooooj, Oooohh, Badayork, la ra la raaaa, la ra la la…” mientras una matutina y repentina migraña me atacaba con misiles tierra-aire…

21 comentarios:

  1. jajajajaja me encantan tus historias!!!
    Sabes? yo creo que igual, si estás preparado, sí deberías adoptar un gatillo...

    ResponderEliminar
  2. que se me olvidaba mandarte un beso!!! y eso si que no...

    ResponderEliminar
  3. Sigues siendo increible, impredecible y divertido (y mucho más fluido que el Guadiana). He cambiado la publicidad a ver si se mueve algo. Échale una ojeada, si te parece...

    ResponderEliminar
  4. Gracias CMQ!!, ¿Un gatito?, quién sabe, jeje, quién sabe...

    Ambar, me encanta la nueva publicidad del libro, la verdad es que no se vende ni uno. Estoy muy agradecido a Clariana y a ti por hacerme publicidad en vuestros respectivos blogs, ahora La Pequeña Candi también se va a unir a vosotras en dicha iniciativa y me ha dicho que va a poner publicidad del librito en su blog a ver si se mueve un poquito, no me canso de deciros: ¡¡Muchísimas Gracias!!

    ResponderEliminar
  5. Y los sueños...sueños son, pero que te quiten lo "bailao" ¡Miau,miau,marramiau,miau!... Me ha resultado divino por lo locamente humano tu post.

    Besitos gatunos con ronrroneo...

    ResponderEliminar
  6. Supongo que es una noche de juerga como otra cualquiera... ¿no se saldría mejor ser adorador de Dioniso, Baco para los amigos?

    ResponderEliminar
  7. Una bella historia.. preciosa.. y los gatos.. mejor los dejaras en su habitat..

    Duncan.. háblame del libro, estoy interesada...

    Un abrazote de linda tarde

    ResponderEliminar
  8. Hola Balo, el libro es "¿Cómo Quieres Que Cuente Estrellas?", lo publiqué a principios de febrero y cuenta las aventuras de Michel IV de Gato que no si tu llegaste a conocer antes de que muriera el pobrecillo, con sus veinte mejores historias durante el año 2.008. Son historias donde se mezcla la mitología cañí con los peculiares pensamientos de Michel IV de Gato, el libro cuesta 15 euros y bueno, me costó 400 editarlo y entre que estoy en paro y medio arruinadillo, pues a ver si recupero algo vendiendo libros, ¡Ay ya te vé, el payooo!, jeje, si estás interesada, tienes la publicidad en el extremo superior izquierdo del blog, y si me pones publicidad en tu blog, vamos ya te hago un altar mayor que a la Macarena, jajaja, besotes!!

    ResponderEliminar
  9. Por un momento me he sentido como cuando miras una serie que hace tiempo que no pillas, y está el resumen ese tan gracioso de "... en episodios anteriores..." y ves todo lo que te has perdido!!!!

    ResponderEliminar
  10. Lo tengo que soltar así... ¡Hoy me he descojonado con tu historia! JAJAJA Voy a terminar pensando que tomas absenta de verdad. Se te va mucho jeje.

    ResponderEliminar
  11. jajajaja Duncan esperaba con ansias la construcción de la estatua, lástima que haya sido un sueño... jajajaj

    ResponderEliminar
  12. y que yo ya me estaba imaginando esa estaua mirando pa cuenca y con un pie ne el guadiana. yo no se si es que tu cuantas todo muy bien o es que yo tengo una imaginacion un poco ligerilla de cascos... o a lo mejor las dos cosas.

    Un beso fuerrrt4eeeeee

    ResponderEliminar
  13. Puf! Qué sueño que tuviste, no quiero pensar que sea cierto lo de la estatua...
    Me imaginé el batallón de gatos vagabundos caminando por la calle atrás tuyo :)
    Un besoote

    ResponderEliminar
  14. Ay madre, si lo único que le falta al Guadiana es una estatua de la Libertad, ideal para que el ayuntamiento se endeude algunos milloncejos más. Ahora, que podían aprovechar la que encargaron para la entrada de la avenida de Elvas y que sigue tirada en un solarcito al lado de Lusiberia...

    ResponderEliminar
  15. OooohhHHhh qué pena! casi lo viví de verdad y resultó que todo fue un sueño!!

    bueno, menos da una piedra y como de sueños también se vive, yo me lo pasé genial dentro de historia

    :D

    un besooooooooo, que pases feliz finde ¡y controla esa absenta que un día de estos va a hacer que te veas con 200 gatos en casa sin recordar después por dónde vinieron!

    ResponderEliminar
  16. ¿Gallina Caponata? ja,ja,ja,ja. Un post muy divertido.
    Besos.

    ResponderEliminar
  17. Creo que la absenta perjudica seriamente la salud

    ResponderEliminar
  18. Duncan en mi blog "Haikus frente al espejo" hay algo para ti.

    Besito volado.

    ResponderEliminar
  19. jajaja, muy bien
    tiene toda la gracia ;)

    ResponderEliminar
  20. Suerte que todo fue un sueño...no podría soportar otra estatua de la libertad ! Eso sí ¡Qué viva la imaginación y los gatos callejeros que te acompañan!

    Estoy con CMQ quizás sea hora de adoptar un nuevo compañero.

    ResponderEliminar

Tu opinión me interesa, y lo sabes...