jueves, 12 de julio de 2012

El Inicio de la travesía.


  …Reunidos, pues, los Bellotonautas, nos dirigimos con viento de poniente, en busca del mítico Guarrino de Oro. Jasón estaba exultante dando órdenes aquí y allá, casi llega a perder la única sandalia que le quedaba. Micho oteaba el horizonte desde la cubierta, con el porte característico de los gatos-frac, disfrutando del olor penetrante del río, mientras los percasoles, curiosos y divertidos, saltaban a nuestro alrededor esquivando vertidos químicos y nenúfares mexicanos cual delfines fluviales… Yo, por mi parte, seguía vomitando por las cuatro esquinas del barco…
  …Según las cartas de navegación de nuestro excelso capitán, otorgadas según decían por la mismísima Hera, (otros aseguraban que compradas en un mercadillo de segunda mano a un portugués medio loco), el Guarrino de Oro debía encontrarse en La Cólquida, una comarca inhóspita dentro de la provincia de Badayork, que hallaríamos remontando el Guadiana contra viento y marea…
… Tras medio día de viaje, acompañados a veces por el vuelo de algunas cigüeñas y otras por el rasante pasar de los grifos en celo que anidan en los eucaliptos del Guadiana, que chillaban como Stukas alemanes ante nuestra presencia, llegamos a la Isla de Lemnos.
  La Isla de Lemnos, se sitúa, según los cálculos astronómicos que hicimos posteriormente, a unos pocos kilómetros antes de llegar a la vetusta Montijo, población fundada por una coalición de fenicios y vikingos, inaudita en la historia y que ya contaré, más extensamente, en otra ocasión…
… Dicha isla, de varias hectáreas de extensión, se enmarca dentro del curso del Guadiana. Habitada biológicamente por cardos borriqueros, estramonio, esporádicos encinares y por mujeres. Solo mujeres, que nos recibieron jubilosas en su concurrido puerto, donde coincidimos con el submarino diesel de nacionalidad portuguesa P-89 que había parado a repostar, y que según nos contaba su tripulación, (estupefacta ante el porte de nuestra envidiable nave) se hallaban en una misión secreta enviados por su gobierno… (Continuará).